domingo, 23 de marzo de 2014

El monumental descaro del priismo colosista

FOTO: ESPECIAL



Por Gustavo Godínez
@escupeletras


Ya son 20 años los que el discurso del priismo lleva colgándose del mito de Colosio. Pero las palabras son una cosa y los hechos otra.
A veces me parece ingenuo creer que el fiel escudero del salinismo realmente tenía la intención de cambiar el rumbo neoliberal que estaba terminando de cancelar el legado de la Revolución Mexicana. Creo que no fue una diferencia en la concepción de gobierno la causa de la ruptura que desembocó en su asesinato, sino que fue un simple intento de sacudirse la sombra de su mentor, una lucha interna carente de fondo ideológico que sólo buscaba zafarse la rienda del presidente.

Pero supongamos que efectivamente Colosio pretendía romper con la ruta neoliberal definida por Salinas.
“Yo veo un México con hambre y con sed de justicia. Un México de gente agraviada, de gente agraviada por las distorsiones que imponen a la ley quienes deberían de servirla. De mujeres y hombres afligidos por abuso de las autoridades o por la arrogancia de las oficinas gubernamentales. Veo a ciudadanos angustiados por la falta de seguridad, ciudadanos que merecen mejores servicios y gobiernos que les cumplan. Ciudadanos que aún no tienen fincada en el futuro la derrota; son ciudadanos que tienen esperanza y que están dispuestos a sumar su esfuerzo para alcanzar el progreso”, dijo Colosio en aquel histórico discurso del 6 de marzo del convulso 1994, unos días antes de su homicidio.

Hoy los priistas se llenan la boca repitiendo que los ideales de Colosio siguen vigentes, que aún los representan. Todo lo contrario.
El “nuevo” PRI ha demostrado una y otra vez que poco o nada ha cambiado desde el magnicidio. Sobra señalar ejemplos. La misma corrupción, represión, ineficacia y saqueo de hace 20 años se viven hoy, pero con un neoliberalismo en esteroides empeñado en arrebatar todo derecho y recurso para beneficiar al gran capital.
Es un monumental descaro que, con un país que tiene al 80% de su población en la pobreza o muy cerca de ella debido a la política económica neoliberal de la que se supone Colosio quería desmarcarse, los priistas digan hoy que el supuesto ideario de su mártir fabricado siguen vigente mientras impulsan reformas que claramente culminan el proyecto neoliberal que dejó pendiente el salinismo. Pero, bueno, no se puede esperar más de ellos.


FOTO: ESPECIAL